Jake mate a la dupla Zabala-Britto. Entra el peón.
Panorama salud.
Por Germán Vals
Para www.noticañuelas.com
Miércoles 12 de agosto del 2020
Tras una fracasada gestión el urólogo y el kinesiólogo tuvieron que retirarse bajo una lluvia de denuncias por parte de la comunidad laboral y de un abogado que realizó una denuncia en la Fiscalía por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
La gestión hospitalaria de los amigos de la política dejó 8 internos fallecidos de Covid, debido a la pésima gestión y las malas decisiones médicas, que tuvieron a cargo durante 12 años. Pero estos inescrupulosos directores no solamente dejaron muertes y desolación, sino que también fueron responsables de una paupérrima administración que a su paso dejaban a los pacientes en malas condiciones nutricionales y sanitarias. La constante del autoritarismo y hostigamiento hacia el personal era moneda corriente, que en su momento fueron denunciados con innumerables reclamos por el sindicato de trabajadores del estado, organización que los nuclea y responsables de un dudoso incendio que «destruyó misteriosamente los archivos del área donde se guardaban todos los documentos».
Desde hace décadas el padecimiento que viven los internos es pura y exclusivamente «culpa de la política», por más vuelta de rosca que se le quiera dar al tema. La negligencia tiene nombre y apellido, personas que han pasado sin tener la misma experiencia para el cargo, desde la ex senadora, Cristina Rasquetti quien con ser maestra de grado tuvo la manija para manejar los destinos de enfermos con déficit mental. Luego consigue dejar su legado a su esposo odontólogo, Gustavo Casamayouret, quien desde su pocas ganas de trabajar e inexperiencia en gestión médica, ocupó el cargo hasta la llegada de los «impresentables», quienes se fueron como ratas por tirante.
Hoy la actualidad no muestra un panorama de esperanza, de vuelta la política metió las manos y de vuelta un profesional con un título en kinesiología va a conducir la salud de personas con extrema sensibilidad social y su compañera de fórmula la Dra. Mariana Fabrizzi, quien hasta hace poco se desempeñaba como directora de un instituto nefrológico local, que luego de cerrar las puertas y de hacer una movida para que se reabra el servicio para las decenas de pacientes que se quedaron sin atención, hasta la fecha nadie pudo cumplir con la promesa de tener un centro de diálisis en el área y evitar que los pacientes tengan que viajar a otros distritos.
Mientras de un lado defienden la designación del Kinesiólogo, Leonel Fangio, otros sectores proponen un concurso profesional para que ocupen el cargo personas con idoneidad y desde un punto de vista cronológico de una línea de tiempo, los sucesivos fracasos que llevaron a desidia, padecimientos y muertes de una noble institución, no es una idea descabellada que la política al fin pueda lavarse el rostro y muestre empatía con los que más necesitan.
Hoy la realidad muestra un lejano y sombrío horizonte: la inexperiencia, la soberbia, el vil dinero, la empatía mostraron la más cruda de las realidades. La portación de apellido y el sumar 2 votos no los hace sublime, los transforma en cómplice y responsables directos de la muerte.
